Dilemas de un esclavo incircunciso
Hace 15 meses que compre a ese esclavo, cuando lo compre me dijeron que fue un valiente soldado que perdió a toda su familia, tal parece que la guerra le dejo marcas muy profundas. Como todo esclavo estos meses fueron de adaptarse a los trabajos que yo le otorgaba, pensé que iba ser fácil, pero parece que las voces o demonios de su cabeza lo atormentan bastante. Su reacción hacia mi sigue siendo como la vez que lo adquirí en el mercado de esclavos, un silencio sepulcral y una mirada equidistante.
Al cabo de una semana decidí ordenarle a mi capataz que le quitara todo el
trabajo y que no se le permitiera trabajar. Las primeras reacciones de este
fueron de alegría y un tanto de soberbia desmesurada, a medida que pasaba el
tiempo la ansiedad unida con la desesperación lo iban consumiendo, un día ese
cumulo no aguanto más e irrumpió en mis aposentos.
Su voz de desesperanza salía a flote unida con palabras de enojo hacia mi
persona, sus expresiones eran de frustración. Dentro de esa frustración trataba
de resolver su propósito dentro del lugar que se encontraba.
Detenidamente lograba realizarle unos pequeños cuestionamientos de que era
ser esclavo. Toda esa conversación termino en una brillante y eficaz conclusión
que logro reformar el propósito de este. Para este momento dicho esclavo solo
agradece el hecho de que yo lo haya comprado.
El siguiente
texto fue una leve introducción en una pregunta que me hice durante varios días.
Esta cuestionaba la definición de lo que significa el servicio. Decidí realizarle
esta pregunta a Dios y su respuesta estremeció un poco mi espíritu. Aquí va
algo de lo que pude sacar de esta conversación.
¿Dios que significa
el servicio para ti?
Te voy a
realizar una pregunta…Si tu colaboras en la casa ¿Que esperas después de que
colaboraste?
Supongo que un
sentido de agradecimiento…
Y si no te lo
dan ¿Qué harías?
Supongo que dejaría
de ayudar.
Y si ese
servicio que realizas fuera para mí. ¿Aceptarías hacerlo sin recompensa alguna?
Supongo que si….
Bueno pues esa
es la respuesta que te doy hoy. Realizar un acto de servicio hacia mi significa
que, aunque no tengas recompensa alguna tu vas a estar siempre disponible para
realizar mi voluntad, no importa lo que suceda sabrás que desde que obedezcas
todo resultara de la mejor manera.
Entiendo,
entonces si de alguna manera tu no tuvieras un propósito para mí, debería estar
siempre disponible para ti…
Exactamente. En
el momento que ustedes deciden servirme yo les doy como recompensa un propósito
que desbordara sus planes y propósitos llenándolos de bendición.
Todas las
respuestas que pude conversar con Dios son sacadas de la biblia y les dejo
algunos de los versículos con los cuales el me respondió.
Romanos 1:1 – Jeremías
29:11 – Isaías 58:8-9 – Salmos 46:10 – 2 Samuel 2:1
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